El segundo viene en camino...

El dia 7 de Noviembre de 1997, nos enteramos que Sonia Alejandra estaba embarazada por segunda vez y que el hermanito/a de Inés María estaba en camino... Fue una noticia hermosa, que llegó a nosotros de una manera inusual, a través de Internet, mientras participábamos en un Chat Room organizado por Sonia y Hernán, para darnos a conocer por éste medio la noticia.

Estas fotos muestran el festejo que hicimos el día siguiente todos juntos para celebrar la buena nueva, en el Restaurante Morena, en la Costanera Norte de Buenos Aires... Vemos a los orgullosos padres (sin poder ocultar la satisfacción), Inesita y Sandra, Natalia y Rodrigo....

Qué me dice de las bi-abuelas?... (no enojarse, no les dije bisabuelas)....y los idem masculinos.... Era también una mini-despedida, porque Yoli y Jorge se van de vacaciones al Brasil, a recorrer el Amazonas...

Inesita explorando los rincones del Restaurante Morena, acompañada por el Abu Jorge, que subió y bajó un montón de veces las escaleras, siguiendo a su nieta, mientras Sonia está disfrutando de la reunión y Hernán pensando en que dirección va a agrandar la casa... (me conviene para arriba, pero la resistencia de la losa no es suficiente, etc, etc...) (siguen más pensamientos técnicos).

Horacio Alberto elucubrando que va a tener que exprimir doble la Caja de Ahorros, para agasajar a más sobrinos, Nati reflejando el nuevo look luego de una intensa exposición al sol de un día para nada nublado (se ve que el agujero de ozono estaba abierto) y Rodrigo, ya acostumbrado a muchos sobrinitos, muestra su solvencia en el tema..., mientras piensa en Lagar Iguana, que debe estar aterrorizando a las mujeres de su casa, si es que se escapó de nuevo, como acostumbra...). Inesita explicándole algo al Tío Horacio, mientras su madre se divierte al mirar la cara del simpatizante de Boca...

Al día siguiente la fiesta continúa, ésta vez en casa y con participación de la familia de Teresa y Carlos Matula, que habían viajado a Buenos Aires y nos acompañaron a almorzar. Teresa muestra sus dotes de madre, ayudándola a Inés con el helado y pensando en cómo se suceden las generaciones y la Abu Beatriz y Natalia disfrutan de la reunión y de tan grata compañia.

La otra parte de la familia Matula que vino a Buenos Aires, Carlos, Soledad y Florencia, dados a conocer al gran público por la presente foto, en otro momento de la reunión.

Y asi seguimos, compartiendo lindos momentos, recuerdos y anécdotas, disfrutando de los chicos y sus gracias, hablando del nuevo hermanito/a de Inés María, de los proyectos de trabajo recíprocos, en fin, de todo un poco, pero con cariño y amistad, para que tengan todo el sabor a lindo.

Y el protagonista principal de ésta historia, sin que se entere de que todo éste festejo se debe a él (ó ella), multiplica de manera prodigiosa las células de su cuerpecito, creciendo a velocidad vertiginosa según un patrón infinitamente complicado y perfecto, siguiendo las maravillosas leyes de la Naturaleza y de la vida, cambiando casi día a día, hasta que se transforme en una criatura visible, que nos asombre con sus avances y nos alegre o preocupe con el transcurrir de sus experiencias por la vida.